Nuestro reciente recorrido en bicicleta por Poblenou revela las luchas por la justicia ambiental urbana en torno a los proyectos de re-naturalización municipales frente a los impulsados por los movimientos de base en un barrio en rápida transformación.
por Filka Sekulova, Francesc Baró, Isabelle Anguelovski, Luis Campos
(Lee este post en inglés)
El pasado día 8 de octubre de 2020, el Barcelona Lab for Urban Environmental Justice (BCNUEJ) y ENT environment and management organizaron un recorrido en bicicleta por los nuevos espacios verdes de Poblenou, un barrio postindustrial perteneciente al distrito barcelonés de Sant Martí. Este evento representó la etapa final del proceso participativo “Mesa para la aplicación de soluciones basadas en naturaleza (SbN) e infraestructura verde (IV) en la región urbana de Barcelona” (integrado en el marco del proyecto europeo Naturvation).
El recorrido de bicicleta contó con la participación de aproximadamente 30 personas pertenecientes a diferentes sectores: la academia, autoridades públicas locales, asociaciones sociales y ambientales, así como grupos de vecinos/as. Las medidas de seguridad de la COVID-19 fueron cumplidas estrictamente, en un evento marcado (pero afortunadamente no definido) por la pandemia. Durante el recorrido, exploramos diversas tipologías de soluciones basadas en la naturaleza, incluyendo desde proyectos a gran escala planificados por la ciudad hasta intervenciones informales impulsadas por los vecinos del Poblenou. También tuvimos la oportunidad de reunirnos con movimientos sociales de base que luchan por permanecer en el barrio a pesar de la manifestación del fenómeno de la gentrificación y de otras presiones urbanísticas principalmente asociadas al Plan 22@. Este plan tiene como objetivo principal convertir 200 hectáreas de parcelas previamente destinadas al uso industrial en áreas del sector de servicios y tecnología de la información (IT).
Intervenciones municipales de renaturalización urbana
Nuestra visita comenzó en el Parc de les Glòries, parque recién finalizado de la ambiciosa y esperada transformación urbana de la antigua plaza de lesGlòries. Situado junto a un nudo de tráfico intenso que se canalizará a través de un túnel viario actualmente en construcción, el nuevo parque reúne espacios públicos preexistentes con nuevas zonas verdes que promueven la biodiversidad, formas de naturaleza ‘no gestionadas’ y áreas para la interacción social y la práctica del deporte. Tuvimos la oportunidad de reunirnos con miembros del equipo de planificación del proyecto “Urban Canopy” de IRBIS, que nos explicaron cómo las discusiones en curso sobre los costos y beneficios ambientales de transferir el tráfico hacia el túnel determinarán las próximas etapas de su desarrollo. Hoy en día, el parque se usa ampliamente como espacio recreativo, pero aún no se ha visto su impacto en el mercado de la vivienda de la zona.
Nuestra siguiente parada fue el nuevo eje o corredor verde de Cristóbal de Moura, un área anteriormente ocupada por complejos industriales. Tal como nos explicó un técnico del ayuntamiento de Barcelona, el eje verde contiene sistemas de drenaje urbano sostenibles (SUDS) que retienen y reutilizan el agua de lluvia y complementan la infraestructura de alcantarillado existente al mismo tiempo que proporcionan espacios verdes de uso recreativo muy necesarios en el periodo de confinamiento que se vivió con la COVID-19. Sin embargo, residentes de la zona nos explicaron que la implementación de este eje verde también atrajo inversiones immobiliarias, como la propuesta de inversión para un alojamiento estudiantil de alto standing, ahora en construcción. Miembros de la asociación local Observatori dels barris del Poblenou explicaron cómo el Plan 22@, lanzado en 2000 para promover nuevas startups tecnológicas en el barrio, estipuló la inserción de nuevos edificios de oficinas y hoteles, reemplazando antiguos edificios industriales por industrias de diseño, tecnologías de información (IT) e infraestructuras turísticas. Por eso, el hecho de que el corredor verde de Cristóbal de Moura atraiga la construcción de viviendas de estudiantes de alto nivel parece todo menos una coincidencia.
Un miembro del Observatori dels barris delPoblenou explica los recientes desarrollos urbanísticos asociados al Plan 22@ en Cristóbal de Moura
Drenaje urbano sostenible (SUD) en Cristobal de Moura junto a una zona habitacional de alto standing para estudiantes (en construcción)
A continuación, visitamos el ya famoso proyecto piloto “Supermanzana” (Superilla en catalán) inaugurado en 2016 en el Poblenou. Esta iniciativa desvía el tráfico alrededor de 9 manzanas (3 × 3), que ahora contienen servicios recreativos y espacios verdes. El área estaba animada, con zonas de juegos llenas de familias y niños, y peatones paseando. Según miembros del grupo de vecinos de la Superilla, a pesar de la oposición inicial de algunos/as residentes y negocios que temían perder sus plazas de aparcamiento o su clientela, la intervención ha mejorado el acceso al espacio recreativo y la cohesión social, particularmente importante durante la pandemia actual. El grupo de vecinos también reflexionó sobre los posibles efectos de gentrificación asociados con la supermanzana, al tiempo que reconoció sus aspectos beneficiosos.
Espacios verdes impulsados por vecinos y grupos locales
Continuamos el recorrido con la exploración de huertos urbanos más informales impulsados por movimientos locales como La Vanguardia y ConnectHort. La Vanguardia es un gran huerto comunitario con un área equivalente a medio campo de fútbol, encajado entre tres hoteles. Ocupado inicialmente por miembros del movimiento Indignados 15-M entre 2011 y 2012, desde entonces ha sido sede de múltiples eventos vecinales culturales, sociales y ambientales. A pesar de que se encuentre en terrenos públicos, el huerto comunitario está actualmente amenazado con la posibilidad de convertirse en el jardín del cercano hotel Voraport. En el caso que se concretice esta intervención, los/as usuarios/as del huerto comunitario ya manifestaron que el área perderá su carácter participativo sociocultural y de relación social, junto con sus espacios de jardinería y horticultura, y se convertirá en un área verde semiprivada para los huéspedes del hotel.
ConnectHort es un huerto comunitario legal, aunque de carácter temporal, nacido a partir de del Plan Buits (Vacíos Urbanos con Implicación Territorial y Social) impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona desde 2012. Hogar de una increíble diversidad de actividades en torno a la permacultura, el compostaje participativo, la jardinería/horticultura orgánica, la construcción ecológica, la meditación y talleres prácticos creativos, el espacio constituye un verdadero refugio verde para muchos residentes, especialmente durante la pandemia. Aunque el contrato de uso siga en vigor por cuatro años más, su futuro es incierto dado que su ubicación actual ha sido calificada como edificio de oficinas de varios pisos por parte del Plan 22@.
Huerto comunitario ConnectHort
Huerto comunitario de LaVanguardia, rodeado de tres hoteles, uno de ellos en construcción
Nuestro recorrido en bicicleta mostró a los participantes la variedad de espacios verdes que se han implementado en los últimos años en el Poblenou. Aprendimos cómo, a pesar de sus importantes características ecológicas y recreativas, como los casos del Parque de les Glòries y el eje verde Cristóbal de Moura pueden, intencionalmente o no, terminar sirviendo a los intereses de nuevos desarrollos inmobiliarios. Estos espacios contrastaron fuertemente con la temporalidad y precariedad de los huertos urbanos dirigidos por los movimientos sociales de base que promueven la cohesión del barrio a través del uso y el compromiso con la naturaleza urbana. El Poblenou está viviendo un proceso de transformación radical, centrado en la promoción de una economía basada den el sector de servicios, tecnológico y del turismo. Si bien las presiones de gentrificación generadas por el Plan 22@ no brindan una perspectiva optimista de equidad, los movimientos y movilizaciones sociales que defienden los espacios comunitarios y la vivienda asequible son un faro de esperanza para la justicia social y ambiental en el Poblenou.
Foto superior: Isabelle Anguelovski hablando sobre el proyecto de la Supermanzana del Poblenou
Todas las fotos realizadas por BCNUEJ